Uno de los primeros grandes viajes internacionales de buceo que hacemos los europeos es el Mar Rojo. Yo, tras un breve viaje a Malta, llegaba a Sharm con una ilusión extraordinaria. ¡Después de decenas y decenas de inmersiones locales, ¡por fin iba a adentrarme en jardines de coral! Estaba como loco por tener delante tiburones, adentrarme en el mítico Thistlegorm, primera experiencia de vida a bordo, peces payaso, peces Napoleón... El Mar Rojo es un sueño como primer destino de buceo. Y después de visitarlo, y revisitarlo, nunca defrauda. Así que vamos a tratar de conjugar todo el buceo del Mar Rojo, sus mejores zonas, fauna y consejos para aquellos que quieran conocer este enclave único en el mundo.
Pocos lugares hay en el mundo tan relacionados directamente con el buceo como el Mar Rojo. Este golfo del océano Índico cuenta con una longitud de 2.200 km y alcanza profundidades de más de 2.000 metros lo que le da a sus aguas gran riqueza y nutrientes que alimentan a sus corales. Considerada como una de las 7 maravillas del mundo submarino, el Mar Rojo ha tenido un papel crucial en el desarrollo del comercio marítimo desde hace siglos. Se puede bucear a través de barcos de buceo vida a bordo que te llevan a lo mejor de la Ruta Norte como Sharm el Sheikh y los naufragios de Hurghada. Y también a través de ruta sur, apasionante y menos concurrida, con extraordinarios jardines de coral y tiburones en Marsa Alam, o más al sur, en Sudán, acercarnos al escalofriante pecio Umbria. Sin olvidar la singular ciudad sumergida de Jacques Cousteau, que fue de los primeros en reconocer el valor de la vida submarina del Mar Rojo, al que dedicó gran parte de su carrera.
La otra forma de conocer el buceo del Mar Rojo es desde resorts y hoteles, que también nos ofrecen la posibilidad de sumar al viaje de buceo la posibilidad de conocer una de las más atractivas y longevas civilizaciones de la Historia. Visitar El Cairo, su inabarcable museo nacional, realizar un crucero por el Nilo y llegar hasta el Valle de los Reyes son suficientes alicientes como para decidirte por realizar un viaje de buceo al Mar Rojo... del que nunca te arrepentirás.
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El Mar Rojo, que toma su nombre por la proliferación de algas que dan un tono rojizo a sus aguas, alberga a más de 1.000 especies de invertebrados y más de 250 especies de coral tanto blando como duro y más de 1.100 especies de peces en unas aguas cristalinas con una visibilidad de hasta 40 metros.
El Mar Rojo ofrece miles de opciones tanto para los que están iniciándose en el buceo como para los amantes de las sensaciones fuertes. Sus paredes verticales, decenas de pecios, jardines de coral, el blue hole de Dahab, el buceo con grandes pelágicos como tiburones ballena, martillo o el temible tiburón longimanus e incluso lugares destinados para los que solo quieren hacer snorkel hacen del Mar Rojo un destino imprescindibles para los amantes del océano.
Podemos bucear en el Mar Rojo en cualquier época del año, aunque las temperaturas del agua pueden variar significativamente. De junio a agosto el agua puede alcanzar los 30°C, pero baja hasta los 20 en febrero. Las temperaturas del aire en Egipto sobrepasan los 40°C durante el verano y disfrutan de unos 20 agradables grados durante el invierno.
La temporada de tiburón ballena, uno de los atractivos del Mar Rojo, va desde finales de mayo hasta finales de julio, cuando este majestuoso animal se puede observar principalmente en el norte del Mar Rojo, pero también aparece por el sur.
Mar Rojo Ruta Norte
Las posibilidades de buceo en la ruta norte del Mar Rojo son prácticamente infinitas y las combinaciones son miles. Podemos hacer safaris solo de pecios o mezclarlo con arrecifes de coral. Buscar un buceo más "adrenalínico" con fuertes corrientes y vertiginosas paredes, aprender a bucear en un entorno más que privilegiado o simplemente hacer snorkel en zonas donde los corales se encuentran a centímetros de la superficie.
Mejores zonas de buceo en ruta norte del Mar Rojo
Sharm el Sheikh
Sharm El Sheikh es reconocido como uno de los mejores destinos de buceo del mundo. Representa un compendio de lo mejor que podemos encontrar en el Mar Rojo: color, abundancia de coral, barcos hundidos y mucha variedad de buceo. Sharm el Sheikh no defrauda, tiene atractivos para todos los gustos, desde pecios de una gran belleza y apasionante historia como el Thistlegorm, extraordinarios arrecifes de coral como los del Parque Nacional de Ras Mohammed, con más 1.200 especies de peces y 220 de corales, el buceo-adrenalina del Estrecho de Tirán con sus fuertes corrientes y paredes que se pierden en el abismo y las inesperadas visitas de preciosos depredadores como los tiburones martillo o ballena. Una parada imprescindible en el buceo por el norte del Mar Rojo.
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Hurghada
Hurghada es célebre por sus pecios, con más de 10 espectaculares barcos hundidos donde en la gran mayoría destaca la profusión de vida submarina pero que en otros, como el Salem Express, representa un gran drama y el buceo en él es sobrecogedor. Uno de los lugares más interesantes de Hurghada es el arrecife Abu Nuhas, auténtico imán para los hundimientos donde en un pequeño espacio podemos encontrar muchos pecios hundidos con diferencias de más de un siglo pero separados por pocos metros.
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Los arrecifes coralinos de Hurghada también tienen un gran valor. Imagen de Eric Burgers
Pero no solo de pecios vive Hurghada. También hay sanos arrecifes coralinos cargados de fauna de vivos colores y donde podemos bucear con delfines mulares, tortugas, bancos de carángidos, atunes, barracudas o incluso tiburones longimanus.
Mar Rojo Ruta Sur
La ruta sur del Mar Rojo es mucho menos conocida que la norte y requiere de más experiencia y más inmersiones. El sur del Mar Rojo destaca por sus excelsos corales, mucho mejor tratados que los del norte y el buceo con grandes pelágicos, sobre todo tiburones, en un entorno menos concurrido donde las emociones fuertes están garantizadas.
Mejores zonas de buceo en ruta sur del Mar Rojo
Marsa Alam
Marsa Alam es la zona que guarda algunos de los mejores y más conocidos puntos de buceo del sur del Mar Rojo. Para los que ya han viajado al sur saben que Daedalus, Elphinstone o Brother Islands es sinónimo de buceo con tiburones longimanus, grises e incluso martillo o tigre. Algunas de las mejores imágenes de los tiburones oceánicos de puntas blancas que has visto han sido tomadas en esta zona de fuertes corrientes que se pierden en abismos de más de 800 metros. Sus sistemas coralinos son además sanos, se encuentran llenos de color y alojan a una enorme variedad de peces de arrecife como los extraordinarios peces loro gigante y en sus praderas vive un extraño y apacible ser, el dugongo, una auténtica vaca marina.
St. John's
St. John's marca la frontera entre el Mar Rojo egipcio y el sudanés. Las seis islas que forman esta zona se encuentran en el parque nacional de Elba y suponen unas vacaciones de buceo de lujo lejos de las aglomeraciones. Los buceadores que visitan St. John´s buscan las emociones fuertes que suponen paredes que descienden hasta los 200 metros de profundidad y unas fuertes corrientes que acercan grandes depredadores como los tiburones martillo o longimanus, tortugas, delfines, mantarrayas o barracudas que acuden a alimentarse de la enorme variedad de grandes y pequeños peces de arrecife que aquí residen.
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Sudán
Sudán se encuentra fuera de las rutas clásicas de buceo en el Mar Rojo ya que no cuenta con una industria tan volcada en el buceo como Egipto y el acceso a sus fondos es más complicado, pero sus fondos son tan extraordinarios o más que los egipcios y mucho menos concurridos. Los buceadores que escogen Sudán como destino de buceo se dan de bruces con arrecifes impolutos que guardan historias de ciencia ficción submarina como el laboratorio Conshelf II de Jacques Cousteau, pecios de primer nivel mundial como el Umbria, cardúmenes de tiburones martillo solo comparables con Isla de Coco, tiburones ballena, mantarrayas y una variedad de peces de arrecife extraordinaria. Sudán es un territorio virgen para los buceadores más selectos.
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