El narval (Monodon monoceros) es un mamífero marino perteneciente al orden de los cetáceos. Se engloba dentro de la familia de los Monodontidae ya que cuenta con un solo colmillo. Esta es la característica más peculiar de este cetáceo, su largo colmillo que puede llegar a medir 2 metros y pesar 10 kilos.
En realidad a los narvales les crecen dos dientes pero uno de ellos, el derecho, nunca sale de la encía mientras el izquierdo, solo en el caso de los machos, emerge de la parte delantera de la mandíbula. Este colmillo no para de crecer hasta la muerte del animal y lo hace en espiral hacia la izquierda
El narval es un cetáceo de cuerpo fuerte y compacto con una pequeña cabeza redondeada. Debido a que vive en zonas árticas cuenta con una gran capa de grasa que le permite mantener el calor. Se trata de un animal muy sociable que vive en grupos de entre 20 y 30 ejemplares... aunque se han llegado a ver grupos de hasta 1.000 durante las épocas de migración.
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Los narvales son de color oscuro en la parte dorsal, con un patrón leopardo manchado, y blanquecinos en su abdomen, lo que les permite pasar inadvertidos para sus depredadores, principalmente orcas, el tiburón de Groenlandia y en menor medida morsas y osos polares. Los narvales no tienen aleta dorsal pero cuentan con una cresta desigual a lo largo de la espalda. El extremo exterior de cada aleta corta se curva hacia arriba y su aleta caudal tiene forma de abanico y una muesca profunda.
Los machos adultos alcanzan una longitud de 4,6 metros y un peso de 1,600 kilos. Las hembras son algo más pequeñas: 4,0 metros de longitud y una tonelada de peso.
Distribución del narval
Los narvales se alimentan en bahías y ensenadas profundas del Ártico, donde encuentran una buena cantidad de bacalao, calamares y otros alimentos tales como peces planos, camarones pelágicos y pulpos. En un momento se pensó que el colmillo era utilizado para agitar los sedimentos del fondo en busca de alimento como hacen otras ballenas como la ballena gris.
Los machos alcanzan la madurez sexual a los 8 o 9 años, y las hembras a los 4 a 7 años de edad. El período de gestación es de 15 meses. Las crías, que miden al nacer 1,5 metros y pesan unos 80 kilos, son de color azul-gris al nacer y según van creciendo van tomando el patrón de leopardo de la piel de los adultos. Los narvales se reproducen en la primavera, el apareamiento ocurre generalmente a mediados de abril y la cría nace el siguiente mes de julio.
La función del colmillo del narval ha sido objeto de cierto debate, pero investigaciones recientes han demostrado está relacionado con ritos de apareamiento. Muchos machos han sido encontrados con los colmillos rotos e incluso se encontró un cráneo con una punta de colmillo incrustada. estos estudios apoyan la teoría de que el cuerno es usado como arma por los machos en batallas por la posesión de las hembras. Esta evidencia, junto con datos que indican un rápido crecimiento del colmillo en la madurez sexual en los machos, sugiere una función de reproducción posible.
El narval es un cetáceo de aguas profundas que llega a sumergirse hasta los 1.200 metros para encontrar alimento. Tiene hasta 10 centímetros de grasa bajo su piel, absolutamente necesaria para su protección en las frías aguas árticas ya que se quedan a menudo atrapados en el hielo. En ocasiones pueden llegar a quedarse atrapados bajo el hielo sin encontrar salida y morir asfixiados ya que "solo" pueden aguantar la respiración de 20 a 25 minutos. Se ha documentado un caso en el invierno de 1914-1915, en Groenlandia, cuando más de 1.000 narvales murieron en una de estas “trampas”.
Los seres humanos han cazado narvales para comerciar con su colmillo desde hace siglos, incluso se cree que el origen del mito del unicornio esté en el colmillo del narval. Durante la Edad Media se comerció con su colmillo para curar la epilepsia, fortalecer el corazón, inducir la transpiración y mitigar ciertos venenos. Un colmillo de narval fue una de las más preciadas posesiones de la reina Elizabeth I.
Los narvales son también importantes para muchas culturas esquimales. Aunque la carne se utiliza sobre todo para alimentar a los perros de trineo, la piel es una fuente importante de vitamina C. Conocido como "muktuk" los inuits hacen una especie de chicle con la piel de los narvales y para muchos de ellos es una auténtica delicia.
Las estimaciones actuales de población en la región del Atlántico Noroeste apuntan a que alrededor de 50.000 son los ejemplares de narval aún existentes. Entre las mayores amenazas de los narvales se encuentran el cambio climático, que está haciendo desaparecer su hábitat, y los vertidos tóxicos. En algunos cadáveres de narvales estudiados se han encontrado metales pesados como el mercurio, afectando no solo a estos preciosos cetáceos si no a la comunidad de inuits que utilizan su carne.
