El Numidia era un carguero británico, construido en Glasgow en 1901, que contaba con un peso de 6.400 toneladas y 140 metros de eslora, capaz de navegar a un máximo de 10 nudos. Se trataba de un buque de gran categoría para la época pensado para realizar largos trayectos, como el último que llevó a cabo.
Antes de continuar, ¿sabías que diseñamos camisetas para buceadores e incluso camisetas de buceo en el Mar Rojo? Son calidad TOP y perfectas para tu compañero de inmersión :-)
El 6 de julio 1901 partió de Liverpool con destino a Calcuta cargado con 7.000 toneladas de materiales, incluyendo vías ferroviarias, pequeños vagones, varios motores de vapor, y 97 tripulantes. Dos semanas después de su partida de puerto el Numidia navegaba por el Mar Rojo cuando chocó a gran velocidad con el norte del arrecife de la isla Big Brother de Islas Brothers.
El Numidia de Islas Brothers, más de un siglo bajo aguas del Mar Rojo. Imagen de festeban
__________________
¿Quieres bucear en el Mar Rojo?
________________________
Tras el choque el capitán ordenó a la tripulación que, viendo la gravedad del accidente, abandonase el barco. Durante los dos meses siguientes se realizaron labores de retirada de carga mientras la gravedad de la situación se agravaba y el agua seguía introduciéndose en el interior del navío… hasta que el buque fue cayendo poco a poco al fondo del arrecife. La proa se rompió y descendió en la pendiente del arrecife y con el tiempo los restos de la sección delantera se han ido diseminando por la ladera.
Buceo en el Numidia
El buque se encuentra hoy aposentado en una pendiente muy empinada en la parte norte de la meseta de Big Brother Island, a una profundidad mínima de 10 metros y máxima de 85. Su quilla se encuentra clavada profundamente en un saliente rocoso, evitando que se deslice hacia el fondo del arrecife a pesar de sus fuertes corrientes... las mismas que traen alimento a los corales y a tiburones grises y martillo entre otros pelágicos.
El casco intacto ofrece a los peces de arrecife una perfecta protección contra las corrientes y el lado de estribor está, tras más de un siglo bajo aguas del Mar Rojo, adornado con preciosos corales blandos hasta el punto de que los ojos de buey son apenas identificables. A lo largo de los pasillos del puente podemos ver peces león en gran número y bajando a la cubierta delantera podemos llegar a las bodegas, que marcan el límite del buceo deportivo. Preciosas nubes de antias naranjas y amarillos, pargos y carángidos se arremolinan en compañía de barracudas y algunos tiburones de arrecife.
Sobre los 40 metros podemos encontrar la entrada a la sala de máquinas que nos regala unos juegos de luces espectaculares, con la maquinaria en muy buen estado, donde podemos ver los cilindros del motor, los indicadores de presión o las puertas de entrada. Esta zona es el hogar de muchos peces cristal que, como en otros pecios del Mar Rojo, se han encargado de ocupar las salas para regocijo de fotógrafos submarinos, que crean unas escenas preciosas con bancos de centenares de estos pequeños peces. La mayoría de los suelos de madera han desaparecido y permiten tanto una mejor entrada de la luz como un más sencillo acceso para recorrer el interior.
Las incrustaciones de coral solo tienen un rival en el Mar Rojo, el Aida, muy cercano, y quizá el Umbria, más al sur, ya en Sudán. Según vamos ascendiendo y finalizando la inmersión podemos admirar, a unos 10 metros de profundidad vigas esparcidas por todo el arrecife y unos cuantos restos de vagón de ferrocarril, una estupenda oportunidad para la fotografía de ambiente.